AÑO: 2013
DIRECTOR: Alfonso Cuarón
INTÉRPRETES: Sandra Bullock, George Clooney, Phaldut Sharma
FOTOGRAFÍA: Emmanuel Lubezki
MÚSICA: Steven Price.
NACIONALIDAD: EE.UU
DURACIÓN: 90 minutos
El último trabajo de Alfonso Cuarón tiene un atractivo añadido y es que, como las nuevas tecnologías son importantes aliados para el género fantástico, Gravity ha sabido aprovechar con éxito todo lo que el 3D puede ofrecerle. Aproximadamente el noventa y nueve por ciento de la película tiene lugar en el espacio y allí el único punto de anclaje para los astronautas protagonistas es su propia nave.Porque, y de ahí el título de la película, las leyes de la gravedad adaptadas, eso sí al mundo del cine, hacen que los objetos que en la Tierra se aferran al suelo parezcan flotar en el espacio con una levedad entre lúdica e inquietante.
El argumento de Gravity es sencillo: una doctora neófita en el mundo espacial llamada Ryan Stone (Sandra Bullock) y un veterano astronauta en su última misión, Matt Kowalski (George Clooney), junto con otros compañeros, se encuentran realizando una serie de trabajos de mantenimiento en su nave. Casi de improviso la basura espacial choca contra ellos y les hace perder el control y el rumbo, dejándoles a la deriva en el espacio.
Es evidente que Gravity no es un relato centrado en el territorio de la odontología, pero también lo es que los responsables del diseño de producción no se han olvidado de la importancia que el cuidado de los dientes tiene no solo en el planeta en el que vivimos sino también en las galaxias a las que siempre hemos querido llegar. En un lugar en el que todo flota y los objetos a la deriva parece que golpean al espectador, que vive su experiencia 3D gracias a las consabidas gafas, sorprende encontrar vagando por el espacio un retenedor dental (concretamente una placa de Hawley). Se podría especular e imaginar lo que pensaron quienes decidieron colocar ese elemento junto a una colección de herramientas, tornillos, cables, objetos cotidianos y restos de naves y satélites. Seguramente cuando idearon el perfecto equipaje de un viajero espacial pensaron que, si más de una cuarta parte de la población tiene o ha tenido un tratamiento de ortodoncia, resultaría muy creíble que uno de los astronautas de la nave espacial protagonista llevara en su equipaje un aparato de mantenimiento. Así que, cuando una parte del contenido de esa nave se desperdiga por el espacio es normal que ese objeto, de uso común y reconocible por los espectadores, permanezca vagando a la deriva.
Gravity combina escenarios digitales, animación y robots, además del trabajo de unos actores cuya expresión facial queda, en la práctica totalidad de la película, oculta tras el casco espacial. Bajo una apariencia realista que podría hacernos creer que se trata de una película científica sustentada por una trama melodramática, Gravity es claramente un relato de ciencia ficción, aunque algunos elementos tan reales y prácticos como un retenedor ortodóntico contribuyan a hacernos creer que el espacio podría ser pronto nuestro segundo hogar.